
Hemos pedido a Anabel Navas, Bierwinkel, que, coincidiendo con el Día de la Mujer, nos aporte su visión sobre el binomio mujer y cerveza. Anabel hace un repaso de la situación que históricamente ha tenido la mujer en el mundo de la cerveza hasta el momento actual.
Dos palabras que van unidas en la historia desde tiempos inmemoriales, mujeres consumidoras y mujeres elaboradoras de cerveza, una tradición que formaba parte de las actividades domésticas y que perduró hasta la Edad Media, los sombreros puntiagudos y marmitas caracterizaban a las “Alewives”. La indumentaria que nos ha transcendido por caracterizar a las brujas era, en realidad, la que identificaba a las mujeres que se dedicaban a la fabricación y venta de cerveza.
Fue sólo a principios de la Edad Moderna, cuando la elaboración de cerveza se distinguió por ser una actividad principalmente relacionada con los hombres.
En el Día Internacional de la Mujer, conmemoramos los años de lucha que las mujeres han llevado a cabo por tener un papel relevante en la sociedad y por la igualdad de género.
El cambio no se detiene, trabajo en Bierwinkel en el sector de la cerveza desde el año 1992, treinta años en los que puedo asegurar que este mundo se ha transformado y mucho, cuando empecé apenas había mujeres que trabajaban en el medio y sus labores eran principalmente administrativas o en sectores como la hostelería.
Sin embargo, en los últimos años y entiendo que, directamente relacionado con el nacimiento y desarrollo de las cerveceras artesanales, cada vez más mujeres forman parte de esta industria, trabajamos en la producción, controles de calidad, comercialización, marketing…. Se está produciendo una profesionalización del sector, así como una progresiva igualdad en el consumo que han sido determinantes para esta evolución.
Según el Informe Socioeconómico del Sector de la Cerveza en España del
2019, no hay prácticamente diferencia de consumo de cerveza entre hombres y mujeres, y aunque, por lo general, siempre se indica que las mujeres prefieren cervezas más suaves, cuando me intereso por los gustos de clientas, compañeras y amigas compruebo que cada vez más se alejan de los estereotipos y nos gustan cervezas muy diferentes atendiendo a gustos personales más que, por pertenencia a un sexo u otro.
No puedo acabar sin mencionar a Pink Boots Society , organización a la que pertenezco desde hace tres años y que realiza una gran labor para visibilizar el papel de la mujer en la industria cervecera, su función es ayudar inspirar y animar a las mujeres que trabajan en el sector a través de la educación y la formación, un cometido que entiendo resulta primordial para ayudar a la evolución y transformación en el sector.