
Erik Coene es una de las referencias del sector de la distribución en el mercado español de la cerveza. CEO de Cervebel, en esta columna de opinión pone el dedo en la llaga sobre la situación que vive un sector completamente clave para la buena salud del mercado cervecero.
Creo que hemos llegado a un punto donde la distribución tradicional ha perdido el rumbo y estamos todos corriendo detrás de los hechos : la administración en general, los bancos, transportistas y otras entidades han trasladado su trabajo a nosotros : nos hacen llenar sus formularios, trabajar en sus programas on line – muchas veces deficientes – lo que nos produce una carga de trabajo y stress que nos quita el tiempo y la energía para hacer lo que era nuestro trabajo : vender !
Por lo tanto en lugar de dedicarnos a la venta e implantación de productos nuevos, estamos gestionando el trabajo de otros y muchos de los distribuidores se han transformado en meros operadores logísticos que pasan los pedidos de lo que han vendido en lugar de comprar y vender lo que han comprado. No tienen stock, sirven bajo pedido y por lo tanto se hacen cada día más prescindible porque no ofrecen nada más que el servicio logístico.
Por el otro lado se ha diversificado tanto la venta por lo que la unidad de venta ya no es la caja, sino la botella, que aparte de ser el picking un trabajo extra, también hace que los clientes ahora esperan del distribuidor que les lleve una caja mixta … con los costes que conlleva.
Concluyendo : si la distribución quiere sobrevivir y ser rentable se tendrá que volver a dedicar a la venta de producto que se vende y rota y donde tenga impacto sobre lo que vende.